Época:
Inicio: Año 1 A. C.
Fin: Año 1 D.C.

Antecedente:
LA CONQUISTA DE MEXICO



Comentario

Oración que Moctezuma hizo a sus caballeros dándose al rey de Castilla


Moctezuma hizo llamamiento y cortes tras la prisión de Cacama, a las cuales vinieron todos los señores comarcanos que estaban fuera de México. Y de su albedrío, o por el de Cortés, les hizo delante de los españoles el infrascripto razonamiento:

"Parientes, amigos y criados míos: bien sabéis que hace dieciocho años que soy vuestro rey, como lo fueron mis padres y abuelos, y que siempre os he sido buen señor, y vosotros a mí buenos y obedientes vasallos; y así, confío en que lo seréis ahora y todo el tiempo de mi vida. Recuerdo debéis tener, que u os lo dijeron vuestros padres, o lo habréis oído a nuestros sabios adivinos y sacerdotes, cómo ni somos naturales de esta tierra, ni nuestro reino es duradero; porque nuestros antepasados vinieron de lejanas tierras, y su rey o caudillo que traían se volvió a su tierra, diciendo que enviaría quien los rigiese y mandara si él no viniese. Creed por cierto que el rey que esperamos hace tantos años, es el que ahora envía estos españoles que aquí veis, pues dicen que somos parientes, y tienen desde hace mucho tiempo noticias de nosotros. Demos gracias a los dioses, que han venido en nuestros días los que tanto deseábamos. Me haréis placer que os deis a este capitán por vasallos del Emperador y Rey de España, nuestro señor, pues yo ya me he dado por su servidor y amigo; y os ruego mucho que de aquí en adelante le obedezcáis bien, y así como hasta aquí habéis hecho a mí, y le deis y paguéis los tributos, pechos y servicios que me soléis dar, pues no me podéis dar mayor contento".

No les pudo hablar más, de lágrimas y sollozos. Lloraba tanto toda la gente, que por un buen rato no le pudo responder. Dieron grandes suspiros, dijeron muchas lástimas, que hasta los nuestros enternecieron el corazón. En fin, respondieron que harían lo que les mandaba. Y Moctezuma primero, y luego tras él todos, se dieron por vasallos del rey de Castilla y prometieron lealtad; y así, se tomó por testimonio con escribano y testigo, y cada cual se fue a su casa con el corazón que Dios sabe y vosotros podéis pensar. Fue cosa muy digna de ver llorar a Moctezuma y a tantos señores y caballeros, y ver cómo se mataba cada uno por lo que pasaba. Mas no pudieron hacerlo, así porque Moctezuma lo quería y mandaba, como porque tenían pronósticos y señales, según los sacerdotes publicaban, de la venida de gente extranjera, blanca, barbuda y oriental, a señorear aquella tierra; y también porque entre ellos se comentaba que en Moctezuma se acababa, no solamente el linaje de los de Culúa, sino también el señorío; y por eso decían algunos no fuera él ni se llamara Moctezuma, que significa enojado, por su desdicha. Dicen también que el mismo Moctezuma tenía del oráculo de sus dioses respuesta muchas veces de que se acabarían con él los emperadores mexicanos, y que no le sucedería en el reino ningún hijo suyo, y que perdería la silla a los ochos años de su reinado, y que por esto nunca quiso hacer guerra a los españoles, creyendo que le habían ellos de suceder; aunque por otro lado lo tenía por burla, pues hacía más de diecisiete años que era rey. Ya fuese, pues, por esto, o por la voluntad de Dios, que da y quita los reinos, Moctezuma hizo aquello, y amaba mucho a Cortés y a los españoles, y no sabia enojarlos. Cortés dio a Moctezuma las gracias cuan más cumplidamente pudo, de parte del Emperador y suya, y lo consoló, pues quedó triste de la plática, y le prometió que siempre sería rey y señor, y mandaría como hasta allí y mejor; y no sólo en sus reinos, sino aun también en los demás que él ganase y atrajese al servicio del Emperador.